28 de febrero de 2011

Reflexiones... de todo tipo

Simples reflexiones...

Como sabrán las últimas semanas han sido diferentes. Muy particulares me atrevo a decir. Muchas cosas están pasando por mi cabeza, por mi vida y no puedo decir más que ha sido muy interesante, porque estoy aprendiendo como nunca.

Fuera de algunos disgustos, que me irritan momentáneamente y a veces más de lo que deberían, creo que las cosas propuestas para este 2011 van caminando. Pocas veces en mi vida, me había sentido tan bien conmigo mismo.

Hace algunos meses hubiera sido impensable, verme montado en una tabla de surf, cambiarme el corte de cabello, o realmente ilusionado en poder encontrar ese alguien para compartir el camino que andamos. Ciertamente, pocas veces en mi vida me he sentido tan bien conmigo mismo, con el rumbo que ha tomado mi vida. Creo que por fin me siento tranquilo y seguro.

Simpático porque también pocas veces en mi vida he estado tan presionado, tan ilusionado y a la vez tan decepcionado. Tranquilidad no me he vuelto loco aún, simplemente si se pueden sentir esas tres sensaciones a la vez. Presionado por lo laboral que a la vez es fuente de frustración, ya que el depender de terceros es realmente mortificante... depender de otras voluntades que no tienen prioridades es realmente doloroso.

Ilusionado, porque como decía tenía mucho tiempo de no sentirme bien, conmigo mismo. Creo que eso es algo que me da muchísima paz. El sueño de www.revistasurco.org es realmente motor de alegrías para mí y el equipo que decidimos vivir la aventura de ir abriendo "surco" para que germine nuevamente la ilusión de jóvenes valientes que se atreven a pensar y asumir el rol que la historia nos pide jugar. Inmensa satisfacción...

Ayer mientras escuchaba a Serrat (que por cierto fue en la mejor de las compañías), llegó la pieza más tierna tal vez para el momento de mi vida que estoy viviendo... es caprichoso el azar, ya que como dice su letra, llevo mucho tiempo esperándote y creo que vamos como debe ser, despacio y con buena letra...

Definitivamente, el escuchar en vivo a mi trovador favorito, fue una magnífica forma de cerrar un domingo excepcional. Aquello de "caminante no hay camino, se hace camino al andar" me trajo recuerdos, anhelos y sueños que hace rato no sentía. Lloré de ilusión, de alegría de nostalgia... fue increíble. Me recordó que todavía existimos humanistas, que hacemos las cosas porque las creemos correctas, y que estamos dispuestos a pagar la cuota con tal de ser fieles a esos principios y valores...

EN fin, un post posiblemente, desordenado como pocos, inclusive algo contradictorio, pero es lo que siento, lo que está pasando ahora y debo dejar constancia de esto... porque no sé cuánto tiempo más vaya a durar, que vaya a pasar... me siento vivo.... y siempre escucharé el "...nunca perseguí la gloria, ni dejar en la memoria de los hombres mi canción... golpe a golpe, verso a verso, golpe a golpe... "