Intercambio de
Conocimientos y Desarrollo.
Jorge
Rodríguez Vives. CEO Strategos Project.
Estamos
en la era del conocimiento. Nunca antes en la historia de nuestra civilización
había existido tanta información en tantos campos del conocimiento y en forma
tan inmediata. Hoy en día el conocimiento es poder.
Para
un país de renta media como Costa Rica esto representa una oportunidad ya que
es una de las nuevas formas de cooperación que hemos propuesto en los últimos
años en los foros internacionales que han discutido el tema. El intercambio de
buenas prácticas, de investigaciones conjuntas (bipartitas o tripartitas) o
construcción de modelos regionales donde el equipo humano de nuestros países
interactúan para construir algo común, son las opciones viables para acceder a
cooperación. Estos nuevos esquemas de
cooperación nos obligan a ser creativos en los planteamientos que podemos
hacerle a un cooperante.
También
es necesario a lo interno del país entender que compartir información y
trabajar en equipo es una oportunidad y no una amenaza. Ya las discusiones
bizantinas sobre la irresponsabilidad que es no aportar conocimiento a una
gestión porque está un “competidor” no tienen cabida. Estamos en la era del
networking y de la construcción colectiva. Por eso es importante impulsar
iniciativas como los consejos de competitividad regional (ya hay 4 en el país)
donde participan los empresarios, el gobierno, el gobierno local, la sociedad
civil y las universidades, todos aportando en torno a una agenda de desarrollo
de largo, mediano y corto plazo. Esto ha
sido reconocido como una buena práctica internacional por ONUDI en su informe
sobre redes de prosperidad 2012.
En
otras palabras hoy nuestra forma de acercarnos a la prosperidad pasa por saber
compartir y construir en conjunto. Nuestra oportunidad radica en hacer cosas
nuevas de forma colaborativa y en saber que solo ante planteamientos comunes
podremos acceder a opciones de cooperación. No tenemos porque tener miedo de
aportar lo que sabemos hacer, es hora de que nuestras cosas buenas sirvan
también a la mayor cantidad de ciudadanos del mundo.